miércoles, 14 de junio de 2017

RR. 3.1 JUSTIFICACIÓN POR LA FE


RR/ 3.1 JUSTIFICACIÓN POR LA FE


INTRODUCCIÓN
Cuando una persona se entrega completamente a Dios, puede tener plena certeza de que Dios la acepta y de que sus pecados son perdonados completamente. 
En otras palabras, la justifica. Y la persona se cerciora de eso teniendo fe en la promesa de Dios.

1.     NO POR OBRAS O POR MÉRITOS PROPIOS

1.  ¿PODÁ ALGUIEN JUSTIFICARSE DELANTE DE DIOS?

Salmo. 143:2 “y no entres en juicio con tu siervo; Porque no se justificará delante de ti ningún viviente (humano).

A/ El salmista recurre a la bondad y justicia de Dios. Aunque muchas veces las Escrituras habla de los “justos” (Gén. 18:23,24), el salmista reconoce que en su sentido absoluto, comparado con Dios, nadie es justo (Job 9:2). El ser humano sólo puede recibir la justicia de Cristo mediante la fe, y nadie puede convertirse en justo por sus propio esfuerzo (Efe. 2:8,9). Las obras son el fruto de la fe, no la raíz de la fe. La fe viene primero, y donde hay verdadera fe, las obras aparecerán inevitablemente en le ser humano.

B/ Muchos creyentes en Dios dicen que no hacen nada malo, que no se mente con nadie y que son “buenas personas” “Nadie es bueno sino Dios”. “¿Qué más tengo que hacer para ir al cielo?” ¿Qué cielo? Los muertos nada saben. Dicen: Pues lo más importante es reconocer que soy bueno. “Por muy bueno que nos creamos, como dice el verso anterior, no pasamos el rasero divino por nosotros mismos, todos tenemos “algo que ocultar",
 al menos, hasta que nos encontremos con Dios en su juicio, bien sea el primer juicio o el segundo para muerte eterna.


2. ¿PUEDE EL HOMBRE SER JUSTIFICADO POR LAS OBRAS DE LA LEY?
Romanos 3: 19, 20. “Pero sabemos que todo lo que la ley dice, a los que están bajo la ley lo dice; para que toda boca se tape, y todo el mundo sea hallado culpable delante de Dios". Por tanto, por las obras de la ley ninguna carne será justificada delante de Él; pues por la ley es el conocimiento del pecado.

A/  La ley no tiene virtudes salvadoras. Exhortaría a todos los que quieren ganar el cielo que tengan cuidado. Debemos mirar el espejo moral de la ley, su norma de carácter, no supongamos que la ley puede limpiarnos. No hay virtudes en la ley. La ley no puede perdonar al transgresor.  La ley impone el castigo. El Señor no salva a los pecadores aboliendo la ley, ya que el fundamento de su gobierno en el cielo y en la tierra es la ley.

B/ El hombre dice que la ley fue abolida en la cruz, y que no hace falta guardar la ley. Pablo cuando se dirige a la iglesia de de Roma, tenia el propósito de viajar desde jerusalén a Roma, ya que tenia muchos amigos en dicha ciudad. Su principal misión era ir a España (Hech. 19:21; Rom. 15:24).

El propósito de esta carta a los Romanos es dejar claro el concepto de la ley. Ya que le habían acusado. Pablo se dirige a los Romanos: Sabemos. Expresión usual de Pablo para referirse a algo generalmente aceptado (cap. 2:2; 7:14; 8:22). El AT. Estaba dividido en tres colecciones de libros: la Ley, los profetas y los Salmos o escritos.

La expresión “la Ley” y “los profetas” (Rom. 3:21;cf. Mat. 5:17; 22:40 etc.), “la Ley” (Jun. 10:34). Pablo se dirige a los judíos para que vieran más clara la evidencia de las Escrituras. Los judíos conocían las escrituras, sabían que la ley era inmutable y que no tenia que imponer a los gentiles sus tradiciones.

C/ Todo hombre esta sometido a la Ley divina (Bajo la ley). Literalmente “en la ley” Es decir, estamos sometidos a la autoridad de la ley (cap. 2:12). Los hombre no tienen ninguna escusa que presentar (cap. 2:1; cf. Sal. 63:11). La boca de los que hablan mentira, será cerrada. (Rom 3:16; 3:19). 

El Señor no salva a los pecadores aboliendo su ley, ya que es el fundamento de su gobierno en el cielo y en la tierra. Por lo tanto, aquellos cristianos que mantienen que la ley a sido abolida en la cruz, hierran y no hay verdad en ellos. Estos cristianos lo usan para hacer de todo lo que le vienen a la mano, y así se justifican. (
Galatas 3:11 “Y que por la ley ninguno se justifica para con Dios, es evidente; porque: El justo por la fe vivirá. Efectivamente, la Ley no justifica a nadie, ni en guardar la ley de Dios no nos hace merecedores del perdón de Dios. Al contrario, la ley nos señala nuestra condición y que estamos haciendo mal, y por lo tanto, nos muestra nuestra situación y nuestra necesidad. “La ley ha sido nuestro ayo, para llevarnos a Cristo, a fin de que fuésemos justificados por la fe”. La ley nos revela nuestra condición de pecador, y hace que sintamos nuestra necesidad de Cristo y que acudamos a él en procurar el perdón la paz y su gracia.


2. POR EL SACRIFICIO EXPIATORIO DE CRISTO.


1.     ¿EN QUIÉN SE MANIFESTÓ LA JUSTICIA DE DIOS?

Romanos 3: 25, 26.
Al cual Dios ha propuesto en propiciación por la fe en su sangre, para manifestación de su justicia, atento a haber pasado por alto, en su paciencia, los pecados pasados. Con la mira de manifestar su justicia en este tiempo, para que él sea el justo, y el que justifica al que es de la fe de Jesús”.

A/ La idea de poner algo. Del Gr. protíhemi, (puso) Viene de la idea de presentar algo delante, es “determinar un propósito”, “decretar”, “proponer”. La misma palabra se traduce “propuesto” en Rom. 1:13. Este último significado con cuerda con las enseñanzas de Pablo en otros pasajes. (Efe. 3:11; 2. Tim. 1:9). 
En el contexto nos está indicar que lo que se destaca en este verso es la exhibición del sacrificio de Cristo. A Pablo le retiñe sus oídos, ya que les había presentado antes y públicamente como Cristo el que fue crucificado retratado entre ellos a Cristo” (Gal. 3:1; (ver DTG. 578, 706-707).

Romanos 5:6. “Porque Cristo, cuando aún éramos débiles a su tiempo murió por los impíos.

B/ Por medio de la fe en su sangre. ¿Que quiere decir Pablo?
¿Los que no creen en el sacrificio de Cristo se perderán?
¿Sólo serán aceptados los que crean en Jesus como su salvador?
¿No se perderán también los que creen en Jesus y en su sacrificio? Donde está la diferencia.

Romanos. 5T:6 “ Porque Cristo, cuando aún éramos débiles, a su tiempo murió por los impíos.

Juan 3:16-18. “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él. El que en él cree, no es condenado; mas el que no cree, ya es condenado, porque no creyó en el Nombre del Unigénito Hijo de Dios.

C/ El sacrificio de Cristo proporciona perdón y reconciliación a los que tienen fe en su sangre.

D/ Dios “ha exhibido a todo el mundo como instrumento de propiciación por su propia sangre, mediante la fe”. Tenemos el ejemplo de Abraham, “por fe en el sacrificio de Cristo, le fue contado por justicia” El sacrificio expiatorio se hace eficaz mediante la fe que lo acepta. ¿Qué pasa con aquellos que no aceptan según los Judíos y el Islam? Las normas de Dios son claras y concisas.

E/ La paga del pecado, como hemos visto en otros estudios, es la muerte (Rom. 6:23). Dios se vio en una encrucijada en la que Satanás tenía la espada por el mango. Tras la caída de Adán y Eva, Dios debía ser “Justo” y cumplir la justicia retirando la vida del ser humano.

F/ Si Dios hubiese aplicado la pena del pecado (la muerte) inmediatamente. El Universo entero habría reconocido que Satanás tenía razón en sus razonamientos, y que Dios era un “dictador” y que había que obedecer a Dios por miedo, en vea por amor. Satanás se regocijaba ante la nueva situación, ya que bien le podría decir:

Si eres Dios de amor, perdona a Adán y Eva.

Si Dios hubiese optado por la segunda alternativa, perdonar “sin más” a Adán y Eva, entonces Dios también sería “injusto”, porque aplicar arbitrariamente su Ley. En esto, también habría dado razón a Satanás quien lo acusaba de ser un Dios caprichoso.

Tenemos a Dios ante un dilema, si aplicaba la justicia debidamente, Satanás “tenía razón”, y si perdonaba, también “daba la razón” a Satanás.

G/ Ante este panorama, Dios saca la tercera opción. Por un lado hay que cumplir con toda justicia, por otro, su magnánimo Amor desea perdonar al ser humano.  Esa tercera opción es . . .Jesús. Su Hijo, Dios infinito. Si Jesús ocupa el lugar del humano, y recibe la sentencia y la pena por el pecado, se cumple la justicia. La Ley de Dios y la justicia Divina quedan satisfechas. 

Por otro lado, al ser un sacrificio sustitutivo, en nuestro, mi, tu lugar, quedamos libres de la condena, de la muerte eterna, y todos los cargos son retirados.

Ilustración:Aunque es insuficiente, podemos tener una idea para entender el equilibrio entre la Ley y la Gracia.

H/ Imaginemos que una persona comete un delito, ha infringido la Ley y hay que aplicarle la justicia. Se le condena a un período de tiempo de cárcel. Pero el Juez desea perdonar al delincuente. Toma la determinación de ocupar el lugar del delincuente y cumplir él con la condena. De este modo, se satisface el sistema judicial, se ha hecho un juicio y se ha cumplido una sentencia.

El delincuente queda por tanto en libertad y libre de cargos, le ha sido imputado a Otro. La pregunta es, tras quedar libre el ex-delincuente, tras ser perdonado, ¿quiere esto decir que la Ley que lo condenó fue abolida?  

¿Quiere esto decir que puede seguir robando? De ninguna manera, la libertad le ha sido regalada por la Gracia, pero eso no le da “carta blanca” para hacer lo que “quiera” como antes. En la aflicción

Volvería a incurrir en “Pecado”, como hemos visto, la Ley es necesaria que siga vigente, sin ella, ¿cómo sabemos qué está bien y que está mal? 

Ahora la Ley sólo me indica que hago bien y que hago mal, y cuando tengo algo “malo”, sólo hay una forma de “limpiar” ese pecado, y es acudiendo de nuevo a la Cruz, al sacrificio sustitutivo de Cristo por mi.


2.   ASÍ COMO ADÁN NOS TRAJO LA CONDENACIÓN, ¿QUÉ NOS TRAJO JESÚS? 

Romanos 5:18.
Así que, de la manera que por un delito vino la culpa a todos los hombres para condenación, Así por una justicia vino la gracia a todos los hombres par justificación de vida.

A/  “Vino la condenación” El texto griego no tiene verbo aquí. Se ha suplido por el verbo “vino” se ha introducido dos veces en este versículo. La construcción griega de este verso es extremadamente concisa para destacar paralelismos y contraste.
Se podría traducirse: “Como por uno, transgresión a todos los hombres para condenación, así también por uno, justicia a todos los hombres para justificación”.

B/  La justicia de Cristo. Gr. dikáioma se traduce como
justificación” en ver.16. En este contexto aparece como”obra de justicia” (BJ) Equivale a la “obediencia perfecta de Cristo” su obediencia hasta la muerte (Fil. 2:8).

No es “justo que un niño nazca con SIDA, que Otro sustituya al culpable, pero voluntariamente así Cristo lo ha hecho por nosotros. La justicia de Dios hecha en la muerte de Cristo, la muerte de Jesús en la cruz por nuestra culpa, por nuestros pecados, pero esa justicia aplicada, realizada, nos es aplicada a nosotros, si así lo deseamos y aceptamos.

De igual modo, tampoco es “justo” que Otro sustituya al culpable, pero voluntariamente así lo ha hecho por nosotros. La justicia de Dios hecha hasta la muerte de Cristo, la muerte de Jesús en la cruz por nuestra culpa, por nuestros pecados, pero esa justicia aplicada, realizada, no es aplicada a nosotros, si así lo deseamos y lo aceptamos.  

El hombre es libre, pero una gran mayoría de países Oriente y de África, Europa, América, y Asia, tienen una mala concepción de Cristo y el Cristianismo. 

Pero la elección es nuestra, inmutable, para bien o para el mal. Hombres y mujeres no conciben a un hombre que dejo su divinidad para salvar a la humanidad.

Tenemos un ejemplo en el pueblo de Israel. (ver nota al final del estudio Sección A)

3.  ¿CÓMO NOS TRAJO JESÚS LA JUSTIFICACIÓN?

Rom. 5:8-10
Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros. . .Pues mucho más , estando ya justificados en su sangre, por él seremos salvados de la ira. . . Porque si siendo enemigos, fuimos reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo, mucho más, estando
reconciliados, seremos salvos por su vida”.

A/ Dios muestra. Gr. sunístemi, Dios “establecer” “probar” El pasaje se puede entender así: “Dios da una prueba de su amor para con nosotros”. La muerte de Cristo sólo demuestra que el amor de Dios es una realidad, sino que también coloca ese amor ante nosotros en toda su grandeza y perfección.
En el contexto o reflexión, el verbo está indicando que Dios continua probando y realizando su amor por el hombre, a través de que este lo rechaza.

B/ Muchos dicen: ¿Donde esta el amor del Padre?. El amor inmensurable del Padre se demostró en la cruz. Este hecho vital debe ser reconocido para poder comprender correctamente la expiación de Cristo (cap 3:25). Cristo o murió para apaciguar a su Padre o para inducirlo a que nos ame.

El amor divino fue el que concibió en el principio el plan de la expiación y de la salvación, y el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo han colaborado en perfecta armonía para efectuarlo (Juan 3:16; 10:30; 14: 16, 26; 15:26; 17:11, 22-23; Rom. 3:24; 8:32; Efe. 2:4-7; 2 Tes. 2:16; 1 Juan 4:10). Para mucho este concepto es locura, por eso matan en el nombre de Dios, no conocen a Dios.


C/ Desde el siglo V el concepto de un Dios tirano y cruel, fue introducido para atemorizar al pueblo y así controlarlo. La iglesia Católica introdujo este concepto, como otros tantos que ha llevado a la incredulidad del hombre.  

La ira divina es el antagonismo de Dios contra el pecado, lo que finalmente resultará en su erradicación completa del universo.
Mientra los hombres elijan permanecer bajo el dominio del pecado, estarán bajo la ira de Dios (ver Rom. 1:18). 

Su amor por los pecadores fue lo que indujo a Dios a dar a su Hijo para que muriera, y él se dio a sí mismo en ese sacrificio expiatorio ( 2 Cor. 5:19).  
Dios ama al pecador, pero aborrece el pecado. Que son dos cosas distintas. Este concepto no lo entienden ni los Judíos ni el Islam.

4.   ¿PARA QUÉ FUE JESÚS RESUCITADO?
ROM. 4:25
El cual fue entregado por nuestra transgresiones, y resucitado para nuestra justificación.

A/  Entregado. Gr. paradídomi. Este verbo significa “entregar algo a otro”. En el nuevo Testamento se le da la connotación y se refiere a alguien que entrega a otro por dinero, o que es traicionado (Mat. 10:4; 17:22; Juan. 6:64, 71).

A/ Si fue entregado por. O “debido a” Se sobreentiende en el contesto que Jesús fue entregado debido a nuestras transgresiones, es decir, como resultado de ellas o a fin de espiarlas. 
Ambos elementos están implicados, pues la muerte de Cristo fue el resultado de nuestras transgresiones, y el propósito de Dios era que mediante esa muerte se hiciera expiación por nuestros pecados. Y al igual que Él fue resucitado, nosotros también lo seremos.


5.  SI NO SOMOS JUSTIFICADOS POR LAS OBRAS, ¿DE QUÉ ES FRUTO NUESTRA JUSTIFICACIÓN?

Rom.3:24.
Siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús.

A/ No podemos hacer ningún mérito suficiente para cubrir la deuda que tenemos con Dios por infringir su ley. Los hombres no tienen nada por lo cual puedan presentarse como justos delante de Dios. 

El hombre estará para aceptar por la fe la justificación como un don gratuito únicamente cuando, con toda humildad, esté preparado para reconocer que se halla destituido de la gloria de Dios, y que no tiene en sí mismo nada que lo haga aceptable delante de Dios.

La Ley condena al hombre por su delito, y el culpable debe pagar su castigo por infringir la ley. Si uno mató o robó. ¿Le exime eso de culpa? ¡De ninguna manera! Su caso está pendiente. Igual sucede con nosotros, el cumplir la Ley de Dios evitará caer en nuevos pecados, pero no nos exime de nuestra culpa previa.  

Sólo Dios ha provisto la manera de quitar nuestra culpa aplicando su ira en la cruz del calvario sobre su propio Hijo en vez de nosotros.


6.  JUSTIFICADOS POR LA GRACIA, ¿DE QUE SEREMOS HEREDEROS?

Tito. 3:7 Para que, justificados por la gracia, seamos hechos herederos según la esperanza de la vida eterna. 


A/ “Habiendo sido justificados”, dependiendo, por supuesto de la entrega del hombre a la voluntad de Dios. Solo Dios se allegara a los que voluntariamente se alleguen a él. Hemos dicho en este blog que Dios nunca coacciona la voluntad del ser humano. Siendo justificados gratuitamente por la gracia. (Rom. 3:24). Puntualicemos este punto.

B/ Mientras que el cristiano mantenga su posición como hijo de Dios, poseerá el gozo de compartir con Cristo la recompensa
de los redimidos (Rom.8:17). Pero si niega, “con todo lo que con ello conlleva”, como hijos de Dios y no quieren ser exponente de los principios del Padre, dejará de ser herederos de la herencia eterna.

C/ Recordemos que en estudios anteriores hemos visto que el pecado causa separación entre Dios y nosotros (Isa. 59:2) Y si Dios es la fuente de la Vida, el estar separado de ella causa la muerte o ausencia de vida (y no sólo espiritual). Si estamos reconciliado con Dios por medio de la intersección de Cristo, esa separación deja de existir, y volvemos a estar “conectados” con la Fuente de Vida Eterna.


D/ La iglesia Católica A. R. Constantiniana. Promulgó que la intercesora de los hombres ante Dios era la Virgen Maria. Esta idea partió en el siglo VII d.C. Y a lo largo de la historia se desarrolló.  
 
En el año 451 en el Concilio de Calcedonia se retomó el tema. En el Concilio de Constantinopla 553 se retomó el tema. Y el 8 de diciembre de 1854 con el papa Pío IX en la bula Ineffabilis Deus. Y en 1950 el Papa Pío XII declaró que la Virgen María estaba en el cielo. (S.H.P.P. t. I p.508-509).

Fue con sagacidad hará prosperar el engaño en sus manos (Dan. 8:25). Quitó la verdad de la Biblia como la única Palabra de Dios, la tradición y el magisterio eclesiástico se equiparan e incluso desplazan a la propia Biblia. 

La verdad de Cristo como único Salvador, Intercesor y dador de la inmortalidad, ha sido sustituido por un Cristo desvalorizado mediante  un Pontificex Maximus puramente humano,  pero se otorgaron títulos y características divinas (Infalibilidad, Cabeza de la iglesia, Vicario de Cristo, etc.  (S.H.P.P. t. II p. 142)

Introdujo la inmortalidad del alma, la resurrección después de morir, perdonar pecados, y la Virgen Maria como Intercesora del hombre.  Deja a un lado a Cristo como Intercesor ante el Padre.

E/ Solo Cristo es el intercesor del hombre. La gracia Gr járis, que aparece 150 veces en el NT. Y Pablo la utiliza 100 veces en el NT. En sus epístolas; y Lucas su colaborador la usa 25 veces etc.


3.   PROMESA AL QUE ACEPTA A JESÚS Y SE CONVIERTE.

1.  ¿QUÉ PROMESA ES HECHA A QUE SE VUELVE A JESÚS COMO SU REDENTOR?

Isa. 44:22. “Yo deshice como una nube tus rebeliones, y como niebla tus pecados; vuélvete a mí, porque yo te redimi”.

A/ Este desafío va destinado a los que adoran a los ídolos en todos los tiempos y aquellos que no aceptan a Jesús como su Salvador.

B/  La justicia y la misericordia son los principios que determinan todo el trato de Dios con el hombre. Satanás sostiene a través de sus agentes que Dios no es misericordioso con su criaturas cuando emplea la justicia divina, y que no es justo cuando es misericordiosos. El plan de la salvación fue trazado para demostrar que esas acusaciones son falsas.

C/  Dios no perdona como lo hace el ser humano. Muchos dicen: “Yo perdono pero no olvido” Dios perdona y olvida. Cuando aceptamos su perdón, ante Dios es como si jamás hubiésemos actuado de tal o de cual manera. Nunca sucedió.

2 . SÍ NUESTROS PECADOS SEAN DE ROJO VIVO, ¿COMO LLEGARÍA A SER?

Isa. 1:18
Venid luego, dirá Jehová, y estemos a cuenta. Si vuestros pecados fueren como la grana, como la nieve serán emblanquecidos; si fueren rojos como el carmesí, vendrán a ser como blanca lana.

A/ Me gusta este texto, no sólo por la promesa de la limpieza, sino como comienza. “Venid. . . y estemos a cuenta”. Dios nos invita a que nos reunamos con él para “echar cuentas”, para aclarar las cuestiones pendientes para saldar la deuda, para aclarar cualquier cuestión. 

Y no lo hace en tono amenazante, sabe de sobras que tenemos el caso perdido, y por eso añade el resto del texto. Nos invita a acudir Él, y nos deja claro que ya sabe que le “debemos”, que tenemos “manchas “ en nuestra vida , y la invitación incluye “y si tus pecados son tan terribles como crees”, no te preocupes, que los borraré, los limpiaré como si nunca hubiese estado ahí.


B/ Si quisiereis oír. Isaías pone el fruto de la obediencia en nuestros labios. Al cristiano se le invita a obedecer, voluntariamente, no hay coacción por parte de Dios.  


El hombre es libre, pero la promesa es libre para aquellos que la quieran aceptar. Nos espera una vida de gozo y bienaventuranzas que es el resultado de la obediencia a la ley de Dios. Dios no puede bendecir a los que no se esfuerzan al máximo. Los dones celestiales son gratuitos, pero el hombre como en la vida hay que obedecer a la ley de amor de Dios.

C/ La cosecha no solamente se recoge en el cielo, sino también en la tierra. (Mat.19:29). El hombre fue dotado de la capacidad de razonar para que la empleara, y la mejor forma de usar ese don es descubrir cuáles son los beneficios de la obediencia y las angustia de la transgresión.


3.    ¿QUÉ SUCEDERÁ CON NUESTROS PECADOS?
Heb. 10:16, 17 .

Este es el pacto que haré con ellos después de aquellos días, dice el Señor. Daré mi leyes en su corazones y en sus almas las escribiré AÑADE: Y nunca más me acordaré de sus pecados e iniquidades.

A/  El pueblo de Israel cuando recibió la ley en el Sinaí, Dios tenía el propósito de que esa ley estuviera escrita en el corazón del pueblo; pero los israelitas se contentaron con considerarlas como un código externo y su observancia como un asunto de cumplimiento también externo. 

En el nuevo pacto, se transforma los corazones y las mentes de las personas (Rom.12:2;2 Cor. 5:17). Los hombre proceden no por su propia fuerza sino porque Cristo mora en el corazón y manifiesta su vida en el creyente. (Gal. 2:20).

B/ El gran proyecto de Dios era pagar la culpa del hombre a través del sacrificio de Cristo. Ya que por ese medio los pecados podrían ser olvidados ahora, pues se había ofrecido el supremo sacrificio expiatorio, lo cual no había sucedido bajo el antiguo pacto. Ese es el amor de Dios para con el hombre.
Ezequiel 33: 14-16.
Y cuando yo dijere al impío: De cierto morirás; sí el se
convirtiere de sus pecados, e hiciere según el derecho y la justicia, si el impío restituyere la prenda, devolviera lo que hubiere robado, y caminare en los estatutos de la vida, no haciendo iniquidad, vivirá ciertamente y no morirá. 
No se le recordará ninguno de sus pecados que había cometido; hizo según el derecho y la justicia; vivirá ciertamente”. 

A/ La restitución es otro tema que la Biblia está definido. En la medida de lo posible, hay que reparar el daño hecho a los demás, además de pedirle perdón a Dios. Esto  es un hecho intransferible.

4 ¿DONDE SERÁN SEPULTADOS SIMBÓLICAMENTE, NUESTRAS TRANSGRESIONES”

Miqueas. 7:18,19.
¿Que Dios como tú, que perdona la maldad, y olvida el pecado del remanente de su heredad?” No tuvo para siempre su enojo, porque se deleita en misericordia. El volverá a tener misericordia de nosotros; sepultará nuestras iniquidades, y echará en lo profundo del mar todos nuestros pecados. 

A/ Miqueas termina el libro con una alabanza a Dios por su misericordia y fidelidad. ¿Que Dios como este? Un Dios que ama a sus hijos, que no importa lo que tu has hecho, un Dios que solo quiere tu bienestar y que te quiere a su lado.

B/ Miqueas ve que Dios perdona la iniquidad de su pueblo. Ve que la única base es el arrepentimiento y la forma. La disciplina de las pruebas es de llevarnos a un reavivamiento espiritual. Lo triste es que no se llevo acabo en la gran mayoría del pueblo de Israel. Miqueas termina su profecía con tristeza porque este cambio no se había realizado en Israel de antaño.

C/ La historia ?se repitiera? Ojala que no, pero la historia tiene razón. La gran mayoría del pueblo de Israel espiritual, se perderá. Por supuesto, que hubo y habrá individuos que se salvarán y que recibirán el perdón. 

Los cristianos, y hombres que no hayan cono conocido a Cristo como su salvador, pero ante los ojos de Dios han hecho lo correcto ante el, estarán el el cielo. Y sus pecados estarán en el fon del mar. Pero el que persevere hasta el fin, sus pecados no serán mencionados nunca. Si apostatara y se pierde, todos sus pecados estarán frente a él en el día del juicio final. (ver Ezq. 18:21-24).
hallará Dios fe en la tierra

5. ¿CÓMO SE COMPADECE DIOS DEL PECADOR QUE SE ARREPIENTE?

Salmo 103:8-13.
Misericordioso y clemente es Jehová; Lento para la ira, y grande en misericordia. No contenderá para siempre. Ni para siempre guardará el enojo. No ha hecho con nosotros conforme a nuestras iniquidades, Ni nos ha pagado conforme a nuestros pecados.  

Porque como la altura de los cielos sobre la tierra, Engrandeció su misericordia sobre los que le temen. Cuanto está lejos el Oriente del Occidente, Hizo alejar de nosotros nuestras rebeliones. Como el Padre se compadece de los hijos, Se compadece Jehová de los que le temen”.

A/ Si entendemos que Israel era hijo adoptivo (Eze. 16:2-14) y (Deut. 32:6) Y Dios hace una pregunta a Israel: La construcción hebrea es enfática: ¿Es así como pagáis a Jehová?
Dios reprende a Israel `por la forma en que trata a Dios. “¿Pueblo loco e ignorante?” No hace referencia a un hombre insensato que no aprecia la bondad de Dios sino a todos.

La ignorancia es muy atrevida, si tienes el conocimiento de Dios y lo ignoras a sabiendas, el castigo es mucho mayor que el ignorante que no sabe dónde está su mano derecha. Hay cristianos que no tienen discernimiento, o sabiduría. Y que hacen las cosas por su propia sabiduría humana, y creen que lo que hace está bien. Esto es insensatez y ningún conocimiento de la verdad. “Sabiendo hacer lo bueno haces lo malo”.


6. ¿QUÉ PARÁBOLA PRESENTÓ JESÚS PARA ILUSTRAR CÓMO ES RECIBIDO POR DIOS EL PECADOR QUE VUELVE A DIOS?

Lucas. 15:11-24. La parábola del Hijo pródigo.

¿Quien no se a enternecido con esta parábola¿
A/ El Padre es siempre que salía a buscar a su hijo a la puerta. Día tras día, el Padre salía, con la esperanza de que su hijo volviese a su casa. ¿Que padre no ha experimentado eso en su vida o una madre?. 

Vemos que es el hijo el que determina ir a su padre. Piensa como un hijo sensato, “Iré a mi Padre, y le pediré perdón, y estoy dispuesto a trabajar como un jornalero más. El hijo ve su situación con otra perspectiva su vida. El hijo va ya arrepentido a su padre. 
El Padre lo ve por el camino, ¡no espera que el hijo traspase el umbral de su puesta! Va corriendo y se echa en sus brazos. Ese es amor de Dios, el no espera, te va a buscar, por los prados y bosque, montañas y riscos. “Ese amor” el hombre no lo comprende, tenemos que morir al yo, para poderlo entender.


7.   ¿QUÉ OCURRE EN EL CIELO CUANDO UN PECADOR SE ARREPIENTE?

Lucas 15:7,10. “Os digo que así habrá más gozo en el cielo por un pecador que se arrepiente, que por noventa y nueve justos que no necesitan de arrepentimiento”. -”Así os digo que hay gozo delante de los ángeles de Dios por un pecador que se arrepiente”.

A/ Los rabinos enseñaban que el pecador tenía que arrepentirse antes de que Dios estuviera dispuesto a amarlo o a prestarle atención. El concepto que tenía Dios era, con demasiada frecuencia, el que Satanás deseaba que tuvieran. Pensaban que Dios concedía su afecto y bendiciones sólo a los que le obedecían y que los negaban a aquellos que no le obedecían. Este era el concepto de los dirigentes judíos. Y creo que hoy no han cambiado mucho este concepto.

B/ Jesús trato de cambiar este concepto farisaico, y presentar el verdadero amor del Padre. Presentando la parábola del hijo pródigo. Cristo vino a la tierra para revelar el carácter y el amor del Padre (Mat. 1:23).

C/ El amor divino habría impulsado a Jesús a hacer su gran sacrificio por un solo pecador (PVGM 146, 154-155). En Juan 3:16, el amor de Dios por el hombre. Hay una relación entre “el pecador” y los “pecados” del ver. 1; (Luc. 15:1). a/ Los publicanos y recaudadores de impuestos (ver cap. 3:12) era muy diferente a los pecadores. Es decir: Había “pecadores” que venían a ver a Jesús pretendía buscar la justicia de acuerdo a la forma prescrita por la tradición rabínica, junto con las rameras, los adúltero y otros cuya vida violaban abiertamente la ley.

D/ Los más estrictos fariseos como los hay hoy, consideraban que el pueblo común, el 'am ha'arets “gente de la tierra” que no habían tenido el privilegio de tener una enseñanza rabínica, era pecadores y estaban excluido de ser considerados como respetables hijos de Dios. Los fariseos eran considerados muy respetables y considerado superiores al pueblo común, y se consideraban más nobles y justo que los de más. ¿Muchos tenemos que examinarnos en que condición estamos nosotros ante este planteamiento?

E/ Cristo vino a buscar “pecadores arrepentidos” (Mat. 2:17). Jesús amaba a los pecadores (Luc. 15:1). Para estos pecadores Cristo sólo tenía palabras de ánimo; para los escribas y fariseos, que se consideraba justos ,sólo tenía únicamente palabras de censura. (Luc.14:3-6; Luc. 14:4).

4.    PAZ CON DIOS.


1. ¿CÓMO LLAMAMOS AL PERDÓN DE NUESTROS PECADOS RECIBIDO GRACIA AL SACRIFICIO Y A LOS MÉRITOS DE CRISTO? (81)

JUSTIFICACIÓN.
La efectividad de la salvación no consiste en que nosotros busquemos a Dios, sino en que él nos busca a nosotros.


2. ¿Como sabemos que somos justificados?
Romanos 3:28. “Concluimos, pues que el hombre es justificado por la fe sin las obras de la ley”

A/ En el contexto histórico, Pablo habla en este verso de la ley en un sentido amplio: el sistema judaico. No importa cuán a conciencia un judío otra persona bajo ese sistema, sino, si no aceptaba a Jesús como el Mesías, no sería justificado. 

Pablo afirma que la ley de la fe excluye la jactancia (Rom.3:27). Si un hombre fuera justificado por sus propios actos, podría jactarse de ello. Pero como es justificado por la fe en Jesús, es claro que el crédito pertenece a Dios, quien justifica al pecador.

B/ “¿Qué es la justificación por la fe?” Es la obra de Dios que abate en el polvo la gloria del hombre, y hace por el hombre lo que éste no puede hacer por si mismo” (TM 456). 

Las obras de la ley no pueden expiar los pecados. La justificación no puede ser ganada. Se recibe solo por fe en el sacrificio expiatorio de Cristo. 
Por lo tanto, las obras de la ley no tiene nada que hacer con la justificación. 

Ser justificado sin las obras de la ley no tiene nada que hacer con la justificación. Ser justificado sin las obras significa ser justificado sin que tengamos nada que merezca la justificación.

C/ En el abito cristiano han entendido y aplicado mal este texto. Ellos dicen: todo lo que uno tiene que hacer es creer, y minimiza las obras o la obediencia a la ley moral. Estos cristianos entiende mal a Pablo. 

En Romanos, y en otras partes, Pablo asigna gran importancia a la observancia de la ley moral. Jesús, Santiago y Juan también lo hicieron (Mat.19:17; Rom.2:13; Sant. 2:10,11; Apoc.14:12). 

Pablo destaca que, aunque la obediencia a la ley no es el medio para justificarnos , quien es justificado por la fe guarda la ley de Dios y, de hecho, es el único que puede guardar la ley. Una persona que no ha sido justificada nunca puede cumplir los requerimientos de la ley.

D/ “La fe es la condición por la cual Dios ha visto conveniente prometer perdón a los pecadores. No es que haya virtud alguna en la fe, que haga merecer la salvación, sino que la fe aferrándose a los meritas de Cristo, proporciona el mérito para el pecador. 

La fe puede presentar la perfecta obediencia de Cristo en lugar de la transgresión y apostasía del pecador. Cuando el pecador cree que Cristo es su Salvador personal, entonces, de acuerdo con la promesa infalible de Jesús, Dios perdona su pecado y lo justifica gratuitamente. El alma arrepentida comprende que su justificación viene de Cristo que, como sustituto y garantía, ha muerto por ella, y en su expiación y justificación” (MST. 1ª p. 430).

Gálatas 2:16. “Sabiendo que el hombre no es justificado por las obras de la ley, sino por la fe de Jesucristo, nosotros también hemos creído en Jesucristo, para ser justificados por la fe de Cristo y no por las obras de la ley, por cuanto las obras de la ley nadie será justificado”.

A/ Hace algunos siglos, Jonathan escribió: “Pero ¿dirá algún hombre que si las palabras beber, mentir y robar fueran eliminadas del idioma inglés en los diccionarios por un decreto del Parlamento, nos despertaremos a la mañana siguiente sobrios, honestos, justos y amantes de la verdad. ¿Sería esto una consecuencia razonable? (J. Swift, A Modest Proposal, p. 205).

Del mismo modo, si la ley de Dios ha sido abolida, como dicen algunas denominaciones cristianas, ¿por qué todavía es pecado mentir, asesinar, y robar? Si la ley de Dios se cambió, también debería cambiar la definición del pecado. Si se elimina la ley de Diosa, entonces los pecadores deberían ser eliminados; pero ¿quién puede creer esto? (ver 1º Juan 1:7-10; Sat. 1: 14,15).

B/ El evangelio señala el remedio para ese pecado: la muerte y resurrección de Jesús. Si no hay ley, no hay pecado; entonces, ¿de que somos salvos? El evangelio sólo tiene sentido en el contexto de la ley y de su permanente validez.

Algunas denominaciones dicen: que la cruz anuló la ley. Eso es incorrecto y irónico, por parte quien lo dice, porque la cruz muestra que la ley no puede ser cambiada. Si Dios no cambió la ley antes de que Cristo muriera, ¿por qué lo haría después? ¿Por qué no eliminó la ley cuando el hombre pecó, para ahorrarle el castigo que trae la violación de la ley? 

Así Jesús no hubiera muerto. Nada muestra más la permanente validez de la ley que la muerte de Jesús, que ocurrió porque la ley no podía cambiarse. Luego la justificación se recibe como un don o regalo de Dios por medio de Jesucristo. Las obras no tienen validez ante Dios. Pero el cristiano por su fe, hace buenas obras, no para justificarse sino por amor a Cristo. 

Efesios 2:8, 9. “Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras; para que nadie se gloríe”.

A/ Es decir: gracia de parte de Dios y fe de parte del hombre. La fe acepta la dádiva divina. Somos salvos cuando confiamos en Cristo y nos entregamos completamente a él. La fe no es la causa de nuestra salvación, sino sólo el medio (Rom. 4:3). 

La salvación no se alcanza por los esfuerzos humanos. El hombre no tiene que hacer grandes sacrificios ni grandes penitencias para ser salvos. Es un don gratuito de Dios al hombre.

3. Cuando Satanás quiere desanimarnos por nuestros pecados, ¿qué seguridad podemos tener?

Rom. 8:33 “¿Quién acusará a los escogidos de Dios? Dios es el que justifica.”

¿Quién acusara? Gr. egkaléo, término legal que significa “echar en cara”, “acusar”, “reclamar” Según cf. Hech. 19:38, 40; 23:28-29; 26:2, 7).

A/ Satanás es el gran acusador de nuestros hermanos (Apoc. 12:10). La declaración del apóstol Pablo es clara y contundente. Dios declara que los suyos son justos. Cristo, que murió por los suyos está a la diestras del Padre intercediendo por ellos. ¿Quién puede condenar a los elegidos de Dios? ¿Quién puede separarnos del amor de su Redentor?

Pablo tiene en cuenta las declaración que hace Isaías 50:8-9. Cercano está de mí el que me justifica. ¿Quién contenderá conmigo? ¿Quién es el adversario de mi causa?. . . He aquí que el Señor Jehová me ayudará; ¿Quién es el que me condenará?


B/  ¿Quién son los escogidos? Según el diccionario Gr. eklektós, son “elegidos”, “entre sacados,” que proviene del verbo eklégomai, que se usa para seleccionar a personas o cosas, como hizo Cristo cuando selecciono a los discípulos. 

Ej. (Luc.6:13; Juan 6:70; 13:18). Las que hace Dios de las personas (Mar.13:20; Hech.1:24; 13:17) y las que hace de las cosas (1º Cor.1:27-28). Cristo hace una distinción entre los que son llamados y escogidos Mat.22:14. 

Pero Pablo identifica a los dos grupos, incluyendo tácitamente en el término “escogidos” da la idea que la invitación ha sido aceptada Rom. 8:30. Para Pablo son elegidos los que han oído, sino los que han aceptado la invitación de Cristo.

4.    JUSTIFICADOS POR LA FE, ¿QUE
EXPERIMENTAMOS?

Romanos 5:1. Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo.

A/ Comprobadas las afirmaciones de Pablo y todos los razonamientos de los cap. 1-4. Pablo ha mostrado claramente que todos los hombres, judíos, gentiles, griegos etc. son pecadores que están bajo la ley y la condenación y que necesitan a alguien que los justifique ante Dios. 

Ha demostrado claramente que esa necesidad de justificación no puede alcanzarse en forma legalista por medio de las obras, o penitencias o grandes donativos. (cap.3:20).

Pero las nuevas buenas del Evangelio, Dios ha hecho todo lo necesario para cubrir las necesidades del hombre. Como un don gratuito de su gracia, Dios ofrece a todos el perdón completo reconciliación mediante la fe en Jesucristo, quien a vivido, muerto y resucitado para la redención y restauración del hombre caído. 

Luego de establecer la doctrina de la justificación
por la fe como la única forma en que los judíos y gentiles, a semejanza de Abraham,puede obtener la justificación.

B/ ¿Cuáles son los beneficios? Uno de ellos es la paz interior, y la promesa de que serán guiados por Cristo y por el Espíritu de Dios. La paz “disfrutemos de la paz”. Si Pablo hubiese querido decir “alcancemos la paz”, la reflexión del verbo sería diferente en Mat. 21:38, en donde se traduce “apoderémonos de su heredad”. 

Como la justificación implica reconciliación y paz, Pablo dice aquí: “puesto que hemos sido justificados por la fe, retengamos [o “disfrutemos de”] la paz que ahora poseemos en Cristo Jesús. La verdadera religión es presentar la Biblia como un estado de paz (Isa.32:17; Hech. 10:36; Rom 8:6; etc.

Ezequiel 18:30-32.

por tanto, yo os juzgaré a cada uno según sus caminos (sus hechos) oh casa de Israel, (Israel, el pueblo espiritual de Dios), dice Jehová el Señor. Convertíos, y apartaos de toda vuestras transgresiones, y no os será la iniquidad causa de ruina. 

Echad de vosotros todas vuestras transgresiones con que habéis pecado, y haceos un corazón nuevo y un espíritu nuevo. ¿Por qué moriréis , casa de Israel? Por que no quiero la muerte del que muere, dice Jehová el Señor; convertíos pues, y viviréis.”


Dios no desea la muerte de nadie, desea la reconciliación con todos los seres humanos y ya ha provisto el medio para ello. Todo está hecho, y la victoria ya ha sido ganada. ¿Aceptarás la invitación que Dios te hace hoy? 
Maranata.

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